¿Por fin agarraron a Marilyn Cote? ¡Ya era hora!

¡Ah, Puebla, nunca decepcionas! Después de semanas de memes, indignación y chismes que seguramente llegaron hasta otras partes del mundo, Marilyn Cote, la “psiquiatra” más fake de México, fue detenida este 21 de noviembre. La Fiscalía de Puebla hizo oficial el anuncio con un tuit que, honestamente, ya se sentía como un episodio de telenovela que necesitaba un cierre decente.

La caída de una “profesional” del Photoshop

El caso de Marilyn es de esos que te hacen decir: “¿En serio nadie sospechó antes?” Durante años, esta mujer jugó a ser psiquiatra, recetando medicamentos y prometiendo curar depresión y ansiedad en 8 días. 

Con ayuda de Photoshop, diplomas falsos y mucha, pero mucha, confianza en sí misma, Marilyn logró engañar a todo mundo (sólo Puebla en realidad). Hasta que, claro, la mentira le explotó en la cara, y no hubo doctorado falso que la salvara.

Después de que se revelara que hasta su supuesta pareja era una mentira más, que su consultorio fuera clausurado y de que las autoridades le dieran chance para demostrar que, efectivamente, era psiquiatra (spoiler: no lo era), Marilyn decidió darse a la fuga

Su escondite elegido: Tlaxcala. Quizás creyó que ahí nadie la buscaría porque, bueno, es Tlaxcala. Pero la Fiscalía de Puebla, en colaboración con sus colegas tlaxcaltecas, finalmente le puso fin a esta historia, y en X compartieron fotos de Marilyn y una credencial con su nombre. Como para que no haya dudas de quién es la estrella del escándalo.

Gilberto Higuera Bernal, fiscal de Puebla, había prometido que estaban a nada de atraparla, y cumplió. Marilyn ahora enfrenta cargos por usurpación de profesión, y se espera que en las próximas horas sea presentada ante un juez de control para que determine su situación jurídica. Pero, podría enfrentar una sanción de dos meses a dos años de prisión, según el Código Penal de Puebla.

Y si algo nos enseñó Marilyn, además de que no cualquiera le puede mover al Photoshop y que mentir descaradamente en tu CV puede traerte consecuencias, es que si alguien supuestamente profesional en psiquiatría te promete curarte en tiempo récord, con títulos que parecen sacados de un tutorial de edición, tal vez —y sólo tal vez— sea buena idea investigar un poquito antes de confiarle tu salud mental.


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