La Constitución tendrá una fiesta de cumpleaños, pero la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no estará en la lista de invitados. Así lo decidió la presidenta Claudia Sheinbaum, quien anunció que el Poder Judicial no será bienvenido en la conmemoración del 108 aniversario de la Carta Magna.
El evento se llevará a cabo el 5 de febrero en Querétaro y contará con la presencia del Poder Ejecutivo y el Legislativo, pero sin rastro de la Corte. Y sí, eso incluye a Norma Piña, la ministra presidenta de la SCJN, quien no recibió ni una tarjetita de “Save the date”.
¿Por qué Sheinbaum los dejó fuera?
La razón oficial de esta decisión es que, según la presidenta, el Poder Judicial no ha respetado a los otros poderes ni a la propia Constitución. En otras palabras, “si no respetan, no los invito”.
En su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que no fue una decisión tomada a la ligera, sino un acto para exigir reciprocidad en el respeto. Básicamente, no puedes llegar a la fiesta si te la pasaste peleando con el festejado.
“Somos republicanos y somos respetuosos, pero también pedimos respeto. Es una relación mutua de respeto, de un lado y de otro”, dijo Sheinbaum, como quien dice “tú empezaste primero”.
Pero aquí hay algo curioso: Sheinbaum asegura que la SCJN no ha respetado al Ejecutivo ni a la Constitución, cuando hay quienes dicen que en realidad ha sido el Ejecutivo quien ha intentado doblegar al Judicial. Desde las reformas que buscan recortar su independencia hasta la narrativa de que la Corte es el enemigo del “pueblo”, ha quedado claro que el respeto del Ejecutivo hacia el Judicial ha sido más bien… opcional, o eso dicen.
SCJN y la 4T: una relación tóxica
Este desaire no es sorpresa si consideramos que la SCJN y la 4T llevan rato tirándose indirectas. Sheinbaum ha insistido en que el Poder Judicial no ha hecho su trabajo correctamente, sobre todo en temas electorales y de justicia.
“Lo más preocupante es que el Poder Judicial renunció a la Constitución”, lanzó la presidenta, dejando claro que no confía en ellos ni tantito.
Sheinbaum adelantó que a partir del 1 de septiembre habrá cambios importantes en la Corte, lo que podría modificar la relación entre poderes. En pocas palabras, se vienen tiempos turbulentos para el Poder Judicial.
Mientras tanto, la SCJN se quedará viendo la celebración de la Constitución desde la banca, sin pastel, sin brindis y sin foto conmemorativa. ¿Responderán a la indirecta o harán como que no pasó nada?
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