Los puntos que Ebrard ya negoció con EU por arancel de 25% a autos

Si ya viste en las noticias que Estados Unidos va a subir los aranceles a los autos y que México, de alguna manera, consiguió un “descuento”, tal vez te estés preguntando: ¿qué está pasando? ¿Nos salvamos o no? Tranqui, aquí te lo explicamos todo este rollo arancelario con peras, manzanas… y autopartes.

Arancel del 25% a los autos

Donald Trump sigue necio con imponer un arancel del 25% a los productos automotrices importados. ¿Su razón? Según él, proteger la industria estadounidense y presionar para que más empresas fabriquen en Estados Unidos en lugar de importar desde otros países.

El problema es que México es el mayor exportador de autos y autopartes a Estados Unidos. Imagínate el golpe si de repente todas esas exportaciones tuvieran que pagar 25% más de impuestos al cruzar la frontera.

Para que te des una idea de lo importante que es México en este sector: el 40% de las autopartes usadas en Estados Unidos vienen de fábricas mexicanas, exportamos casi 3 millones de vehículos al año al gabacho. Además, muchas marcas como Ford, GM, Nissan y Volkswagen ensamblan sus autos aquí para luego venderlos en el otro lado de la frontera.

Si de la nada suben los aranceles, el precio de los autos en Estados Unidos se dispararía, afectando no solo a las empresas, sino también a los consumidores gringos.

México negocia con EU trato preferente y “mejor precio” de aranceles a autos

Aquí es donde entran Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard (quien ya ha tenido varias conversaciones con su contraparte estadounidense), que explicaron que México no pagará el 25% completo, sino que tendrá un trato especial gracias al T-MEC (el tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá).

¿Cómo funciona este descuento? Básicamente, el impuesto dependerá de cuánto contenido (material y mano de obra) mexicano tengan los autos y autopartes.

Puntos clave del acuerdo:

  • México no pagará el 25% de golpe, sino que tendrá reducciones dependiendo de qué tanto sus productos cumplan con las reglas del T-MEC.
  • Si un auto tiene suficiente contenido mexicano, el arancel será menor.
  • Autopartes que cruzan la frontera varias veces no pagarán el impuesto en cada cruce. (Porque sí, algunas piezas van y vienen entre fábricas mexicanas y estadounidenses hasta siete veces antes de convertirse en un auto terminado).
  • México sigue siendo más competitivo que otros países como Japón y Alemania en la exportación de autos a Estados Unidos.

Marcelo Ebrard lo explicó así: “Lo que estamos buscando es que los productos hechos en México al final tengan el mejor precio que cualquier otro país como Alemania, Japón”. Es decir, aunque haya impuestos, México sigue siendo una opción atractiva para la industria automotriz.

¿Y ahora qué sigue?

A pesar de este “descuento”, las negociaciones siguen. El gobierno de Sheinbaum espera dar una respuesta completa después del 2 de abril, cuando entren en vigor las nuevas tarifas de Estados Unidos.

Por ahora, México logró proteger su industria automotriz y evitar un golpe inmediato a las exportaciones.


Comments

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *