El pleito entre Gerardo Fernández Noroña y Alejandro ‘Alito’ Moreno sigue escalando. Tras el encontronazo en el Congreso, el líder priista no dudó en devolver la ofensiva, acusando al morenista de querer desviar la atención de un escándalo inmobiliario.
La bronca que pasó del Congreso a los micrófonos
Lo que comenzó como un choque a gritos en la Comisión Permanente ya se convirtió en una guerra mediática. En entrevista con Ciro Gómez Leyva, ‘Alito’ Moreno calificó a Noroña como un “cobarde provocador” y justificó su reacción violenta en el Congreso.
El priista admitió haber “explotado”, pero dijo que lo hizo porque Noroña había amenazado a Lilly Téllez y Federico Döring momentos antes.
“El verdadero distractor es su mansión”
La defensa de Moreno giró rápidamente a un contraataque: acusar a Noroña de querer tapar el escándalo de una supuesta mansión valuada en 12 millones de pesos.
Mientras tanto, Noroña ya anunció que denunciará a ‘Alito’ y exigirá su desafuero, calificando lo ocurrido como “grave y sin precedentes”.
Un pleito con trasfondo político
Lejos de ser un simple intercambio de insultos, la bronca refleja el ambiente cada vez más enrarecido dentro del Congreso. La discusión de fondo gira en torno a dos temas explosivos: la propuesta de que Estados Unidos intervenga militarmente en México y las acusaciones de traición a la patria contra el PAN.
En medio de ese escenario, el choque entre Noroña y Moreno fue solo la chispa que encendió una bomba política.
Confrontación que pinta para largo
Lo que sucedió no parece quedarse en un episodio aislado. Morena insiste en llevar a tribunales el caso y en empujar el desafuero de Moreno, mientras el PRI ya prepara su narrativa de persecución política.
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