Las mujeres en el regional mexicano resignifican el género para visibilizar problemáticas sociales

El regional mexicano y su fusión con los corridos tumbados ha ubicado a México en el mapa de la industria musical a nivel mundial, en donde durante mucho tiempo los referentes que gobernaron esta industria fueron hombres, haciendo música para hombres, aunque también es importante señalar que sí llegaron a haber algunas excepciones durante estos inicios.

Jenni Rivera fue una de las artistas mujeres que sentó las bases para que más mujeres empezaran a adentrarse en este género, con el cual hasta el día de hoy hemos logrado tener a un gran número de artistas como Yuridia, Vivir Quintana, Camila Fernández y muchas otras más, a las que desafortunadamente no todas logran tener la visibilidad y reconocimiento que se merecen por su talento y trabajo constante.

Las mujeres en la industria musical tienen que trabajar el doble, pero si es en el género regional lo hacen a más del triple

A pesar del avance significativo que han tenido las mujeres al poco a poco ir adentrándose en este género que, en su mayoría, es gobernado por los hombres, aún sigue existiendo un alto nivel de “camaradería” que envuelve al regional mexicano, especialmente en los corridos tumbados, en donde la mayor parte de sus artistas más sobresalientes, como Peso Pluma, Junior H, Tito Double P o Natanael Cano, son quienes colaboran entre ellos mismos de manera constante.

Pero el tema de las colaboraciones no es lo único que les cierra la puerta a las demás mujeres artistas, pues muchos de ellos cuentan con sus propias disqueras o sellos discográficos que les permiten componer canciones solo para ellos o para otros artistas hombres del mismo gremio, dejando de lado el talento de las cantantes femeninas que luchan por tener un espacio y que se les reconozca su esfuerzo en este género musical.

El problema no es nuevo, ya que durante años las mujeres han tenido que luchar por su representación en diversos géneros como el hip hop, country o urbano, y aunque algunos de ellos sí han logrado avanzar hacia la paridad de género, la música regional mexicana se ha quedado centralizada en los hombres y con grandes bloqueos hacia el reconocimiento e incluso la entrada de las mujeres a un ambiente machista.

Vivir Quintana como una de las mujeres referentes en los corridos feministas contra la violencia de género

Vivir Quintana es una cantante, compositora y activista mexicana nacida en el estado de Coahuila en 1985. En los últimos años ha cobrado una fuerte relevancia por ser de las pocas mujeres que se enfrentan al género de los corridos desde una visión totalmente diferente a la que estamos acostumbrados a oír sobre este género. Con el lanzamiento de “Canción sin miedo” y con su segundo disco “Cosas que sorprenden a la audiencia”, Quintana ha hecho de la música un himno feminista contra la violencia de género y los feminicidios.

El lanzamiento de su último disco la ha llevado a vivir una experiencia única, en donde algunos de sus temas como “Mi casita” y “Al tiro” fueron proyectos musicales en los que participó con una agrupación de seis mujeres para darle vida a letras muy específicas que abordan historias llenas de violencia, machismo y misoginia, en donde su trabajo ha sido fuertemente aplaudido por otras artistas como Julieta Venegas, quien ha destacado la importancia de su trabajo en las vivencias históricas de la mujer.

Su música no solo se trata de abordar temas tradicionales de este género, sino que con ella hace un tipo de denuncia social a la violencia que viven las mujeres, con historias reales de sufrimiento y resistencia. Además, ha desarrollado proyectos narrativos que cuentan la historia de diferentes mujeres a través del ritmo y la vibra única de lo que son originalmente los corridos.

Yuridia, como una de las artistas más relevantes y con mayor participación en los escenarios internacionales

Aunque en un principio su música nació desde el género del pop en español, durante los últimos años su entrada al regional mexicano no solo ha cambiado su carrera de una manera sorprendente, sino que también vino a mover el panorama de este género y abrió nuevas puertas para que otras mujeres pudieran hacer lo mismo. Su llegada tuvo un efecto expansivo tanto en la industria como en las audiencias y en cómo se percibe el papel femenino dentro de un género dominado por los hombres.

Con su música ha demostrado que una voz femenina puede dominar temas de desamor mexicano, en donde la narrativa viene desde un enfoque masculino y en donde casi siempre se estigmatiza e incluso se ofende a las mujeres con adjetivos peyorativos o palabras que las etiquetan bajo una connotación desfavorable y llena de estereotipos sexualizados.

En cada uno de sus proyectos ha trabajado con productores de alto nivel como Édén Muñoz, a quien considera como uno de sus pocos amigos dentro de la industria. Además, en más de una ocasión ha apoyado a diferentes autoras que antes no tenían una plataforma ni la oportunidad de poder mostrar su talento. Con esto, ha logrado una mayor visibilidad al género femenino y ha presionado a la industria para que se busque más talento femenino y no solo se enfoque en el masculino.

Existe una gran variedad de mujeres en el regional mexicano, pero solo unas cuantas han logrado llegar al mainstream

Entre bandas locales, solistas independientes, corridistas, cantautoras de mariachi, norteño y diferentes subgéneros del regional, hay al menos entre 3 mil y 5 mil mujeres en México y Estados Unidos que trabajan de manera activa para formar una carrera sólida en esta industria. Sin embargo, de esta enorme cifra solo entre 20 y 30 mujeres han sido reconocidas de manera nacional o internacional tanto en plataformas de música como en festivales, palenques, conciertos y medios de comunicación, lo que significa que menos del 1% recibe visibilidad real.

En los charts, la desigualdad también se hace presente y aún más visible año tras año, pues en las últimas proyecciones el 90% de los artistas más escuchados son hombres y menos del 10% son mujeres, en donde solo el 3% ha ocupado un lugar en el género de los corridos. Y es que ya vimos que el problema no es el talento, sino la falta de oportunidades y las barreras con las que se tienen que enfrentar para poder sobresalir por encima de una pirámide patriarcal.

Algunos de los factores por los cuales no se les ha logrado dar mayor visibilidad son los siguientes:

  • Falta de inversión en las disqueras
  • Poca difusión en medios tradicionales
  • Falta de espacios en festivales
  • Sesgo del público
  • Violencia, acoso y barreras dentro de la industria

¿Cuáles son las artistas que actualmente la están rompiendo en el regional mexicano?

A pesar de todas estas dificultades y barreras hacia las mujeres de la industria regional, muchas de ellas han estado luchando durante más de una década por el lugar que hoy en día tienen dentro del regional mexicano y los corridos. Entre ellas destacan Ángela Aguilar, Yuridia, Becky G, Majo Aguilar, Lupita Infante, Ivonne Galaz y Vivir Quintana, una lista que se queda demasiado corta frente a la de los hombres en la actualidad.

Las mujeres no solo tienen que lidiar con machismo en la música, comportamientos violentos y riesgos en eventos y palenques alrededor del país; también son señaladas por aspectos físicos en donde una mujer debe cumplir con ciertas “graciaspara lograr ser vista como una artista “atractiva” o llamativa más allá de su talento. Así que no se trata de que no haya talento, porque sí lo hay y mucho: se trata de una barrera histórica sostenida por la desigualdad de género.


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