En un año decisivo para la justicia en México, el presupuesto que se planea destinar a las elecciones judiciales es tan alto que supera (o apenas empata) lo que recibirán algunos estados para sus gastos ¡durante todo el año!
Sí, así de impactante. El INE ha aprobado un presupuesto de 13,200 millones de pesos para organizar esta elección de jueces, juezas, magistradas y magistrados, la comparación deja en claro las desigualdades en la distribución del dinero público y pone sobre la mesa una gran pregunta: ¿realmente es prioridad gastar tanto en una elección cuando algunos estados ni siquiera llegan a recibir esa cantidad para todas sus necesidades?
Pues, esta cifra no sólo es mayor que los 12,000 millones que costó la última elección presidencial, sino que además supera o se asemeja al presupuesto anual completo que reciben varios estados del país.
Comparación de presupuestos: INE vs. Estados
Para poner en perspectiva este gasto extraordinario, muchos estados del país reciben montos similares o incluso menores en sus presupuestos anuales.
Uno de los estados más industrializados del país, Nuevo León, tiene un presupuesto de 58 mil millones, lo que representa menos de cinco veces el presupuesto solicitado para la elección judicial; por su parte Guerrero maneja 44 mil millones de pesos, solo 3.3 veces el presupuesto proyectado por el INE.
En cambio, el presupuesto para Campeche apenas alcanza los 12 mil millones, Baja California Sur queda en 11 mil millones y Colima en unos escasos 9 mil millones. Es decir, ¡todo el dinero que reciben estos estados no iguala lo que se gastará en elegir jueces, juezas, magistradas y magistrados!
Así mismo, otros estados como Aguascalientes, con 15 mil millones de pesos, y Nayarit y Tlaxcala, cada uno con 14 mil millones, perciben poco más de lo que se planea destinar para organizar las elecciones.
El presupuesto es precautorio, no fijo
Y espérate, porque aquí no termina la historia. El INE, dirigido por Guadalupe Taddei Zavala, dejó claro que esos 13,200 millones de pesos no son fijos, sino precautorios.
¿Por qué? Porque están a la espera de que los tribunales resuelvan los juicios legales que podrían parar o modificar la elección judicial del próximo año. Pero aún con toda la incertidumbre, el INE tiene que prepararse para organizar la elección de más de 800 jueces, juezas, magistradas y magistrados, que cubrirán la mitad de todo el país.
Y como si eso fuera poco, el INE también ha pedido 4,620 millones de pesos para una consulta popular y un total de 40,474 millones de pesos para sus actividades del próximo año.
¡Una cifra brutal! Para que te hagas una idea, ese monto no sólo supera lo que 15 estados del país (sin contar los que ya mencionamos) reciben en su presupuesto, sino que hace que el gasto para elegir a jueces y magistrados sea astronómico. Sin duda, la elección judicial será la más cara de la historia.
¿Por qué es importante esta comparación?
La distribución de los recursos es un tema complejo, ya que involucra factores de población, ingreso y necesidades específicas. Sin embargo, esta comparación podría llevar a cuestionar si el gasto público debería reorganizarse para ayudar a reducir las brechas entre las entidades federativas y contribuir a un desarrollo más equitativo en todo el país.
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