Se terminó una era: después de cuatro años llenos de emociones, victorias y polémicas, Checo Pérez deja de ser piloto de Red Bull Racing. La noticia ya se confirmó oficialmente, después de meses de rumores y señales que apuntaban a su salida. Aunque tenía contrato hasta 2025, la escudería decidió tomar otro rumbo y le dio las gracias al mexicano, dejando su lugar al joven piloto Liam Lawson.
El adiós que ya olía desde lejos
Si has estado siguiendo la temporada, seguro ya lo veías venir. Desde el Gran Premio de Qatar, donde Christian Horner básicamente le dejó la puerta abierta, las cosas no pintaban bien para el mexicano. Finalmente, el 18 de diciembre se confirmó lo que ya era un secreto a voces: Checo y Red Bull se separan.
Hace tan sólo un par de meses, el mexicano había firmado una extensión de contrato con la escudería austríaca, peeero los resultados de esta campaña, en la que no pudo refrendar su subcampeonato, fueron parte de las cosas que determinaron que se vaya del equipo.
En su comunicado, el equipo agradeció las victorias, los podios y el papel clave de Checo en la época más exitosa de la escudería. Por su parte, el piloto mexicano también publicó un mensaje en redes sociales, dejando claro que no es el fin de su historia en la Fórmula 1.
¿Y ahora qué sigue para Checo?
Aunque en 2025 no veremos a Checo en la parrilla (ya no hay asientos disponibles), 2026 pinta interesante. Ese año llegarán nuevas regulaciones y equipos como Cadillac, lo que podría abrirle las puertas para regresar con fuerza.
Mientras tanto, la salida de Checo ha dejado huella. El piloto mexicano no sólo representó talento en la pista, sino que también fue un gigante del marketing para Red Bull, generando más del 60% de las ventas de productos de la escudería.
Unfollow masivo
Además, las redes de Red Bull también notaron la salida de Checo. Más de 360 mil fans dejaron de seguir a la escudería como protesta. En Instagram, se cayeron más de 300 mil seguidores, y en X, otros 40 mil, tan sólo en cuestión de horas.
Para muchas y muchos mexicanos, Checo representa algo más grande que una escudería. Es el piloto que llevó la bandera de México a lo más alto de la Fórmula 1, enfrentándose a críticas, favoritismos y rivalidades.
Así que, aunque Red Bull le dio alas, Checo no necesita ninguna para volar alto. 2026 lo espera, y sus fans estarán ahí para animarlo como siempre.
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