La Reforma Judicial, que ya fue aprobada por el Senado de la República, llegó a los Congresos estatales y el primer estado en aprobarla fue Oaxaca, seguido de Quintana Roo, Tabasco y Veracruz. 

Se requiere que 17 Congresos locales aprueben la reforma

Para que la reforma cobre rango constitucional se necesita el aval de 17 Congresos locales, por lo que, una vez aprobada en el Senado, se envió a las legislaturas de todos los estados, para que sea discutida. Cabe señalar que el Congreso de cada entidad determina la cantidad de votos necesarios para validar una reforma constitucional. 

Una vez que 17 estados aprueben la reforma, las cámaras del Congreso de la Unión tendrán que enviar una minuta al Poder Ejecutivo para publicarse en el Diario Oficial de la Federación y se fijará la entrada en vigor de la misma.

Oaxaca el primer estado en aprobar la reforma

Oaxaca sólo requirió de seis minutos de sesión para darle el sí definitivo a la reforma, con 41 votos a favor (incluidos los de diputados del PRI, PAN y PRD) y ninguno en contra, el Congreso de dicho estado aprobó la minuta enviada por el Congreso de la Unión. Lo que hizo a Oaxaca el primer estado en aprobar la reforma judicial.

Quintana Roo, Tabasco, y Veracruz también aprueban reforma judicial

Por su parte, el Congreso de Quintana Roo aprobó la reforma con 21 votos a favor y 4 en contra. En esta sesión varios legisladores declararon sus posiciones tanto a favor como en contra. Además el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Jorge Satén Cervantes, mencionó que se trata de una reforma necesaria para el país donde el pueblo tendrá un papel decisivo para la impartición de justicia en México.

En Tabasco, mientras afuera del recinto legislativo cientos de personas se manifestaban, el Congreso del estado dio luz verde a la reforma con 24 votos a favor y 8 en contra (4 del PRD, 3 de Movimiento Ciudadano y 1 del PRI).

Con escenario similar, la sesión en Veracruz terminó con 32 votos a favor y 11 en contra. Durante la votación, Miguel Hermida, diputado del PAN y vinculado al senador Miguel Ángel Yunes, declaró que la reforma es “electoralmente imposible de implementar”, destacando el por qué de su voto en contra.