Desde la pandemia, el fenómeno de la gentrificación ha sido tema central en varias zonas de la Ciudad de México. La llegada masiva de extranjeros y el auge de plataformas como Airbnb han disparado los precios de la vivienda y han encarecido las zonas, lo que ha causado que muchos residentes locales se vean obligados a mudarse.

Limitar noches en la que una propiedad puede ser rentada

De ahí que se busque un equilibrio entre Airbnb, los hoteles tradicionales y las necesidades de los habitantes de la ciudad. Para asegurar que las plataformas no agraven el problema de la vivienda, pero sigan impulsando el turismo.

Motivo por el cual el día 2 de octubre de 2024, el Congreso de la Ciudad de México aprobó un dictamen por el cual limita a 180 noches la cantidad en la que una propiedad puede ser rentada como hospedaje o alojamiento temporal.

Esta modificación se hace a la Ley de Vivienda y la Ley para la Reconstrucción Integral, también establece que si los dueños exceden este límite, perderán su derecho a renovar el registro de renta por un año.

Prohibir el uso de viviendas sociales para hacer negocio en Airbnb

Hoy en día, es más rentable alquilar propiedades a través de estas plataformas que hacerlo de forma tradicional, lo que ha provocado que los precios de las rentas suban. Con esta modificación a la Ley de Vivienda, se busca evitar el desplazamiento forzoso o la gentrificación. 

Por ello, se propone prohibir el uso de viviendas sociales o construidas para los afectados por el sismo del 2017, en plataformas de alojamiento para hacer negocio. De esta manera, se evita que empresarios compren estas viviendas con fines de lucro.

Con todo esto se busca proteger a las personas acreedoras de vivienda social para que no se vean obligadas a desplazarse por rentas o precios de servicios excesivos. 

El problema con Airbnb

El crecimiento de plataformas como Airbnb ha transformado por completo la industria del turismo, permitiendo a propietarios rentar sus inmuebles a turistas de forma rápida y accesible. Esto ha beneficiado tanto a viajeros, que ahora tienen más opciones, como a quienes buscan ingresos extra. 

Sin embargo, en ciudades como la CDMX, el uso masivo de estas plataformas más el pago en divisas extranjeras, han hecho que aumenten los precios de la vivienda, los servicios y los alimentos, afectando a los residentes que ya no pueden pagar rentas o comprar en sus vecindarios.