Con el inicio de un 2025 cargado de cambios, Loretta Ortiz Ahlf fue elegida como presidenta de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Pero más allá de su nombramiento, su trayectoria y vínculos políticos no han pasado desapercibidos.
¿Quién es Loretta Ortiz?
Loretta Ortiz no es una recién llegada al mundo judicial ni al político. Abogada egresada de la Escuela Libre de Derecho, tiene una maestría y un doctorado en Derechos Humanos por instituciones de prestigio como la Universidad Iberoamericana y la Universidad Nacional de Educación a Distancia de España. Ha impartido clases en instituciones nacionales e internacionales de renombre, como la Academia de Derecho Internacional de La Haya.
Sin embargo, su currículum no es lo único que llama la atención. Antes de entrar al máximo tribunal, Loretta fue militante activa de Morena. De ahí su respaldo a la reforma judicial promovida por el presidente López Obrador, un punto que ha levantado más de una ceja en el ámbito jurídico y político. Cabe mencionar que es la única ministra de la Primera Sala que participará en el proceso electoral del 2025.
La reforma judicial y su liderazgo en la Primera Sala
Loretta asumirá el cargo en enero de 2025, en un momento clave para la Corte. Su mandato, que terminará en septiembre de ese mismo año, será el último antes de que las Salas desaparezcan debido a la reforma judicial recientemente aprobada.
A pesar de las críticas, Ortiz ha defendido la reforma como una herramienta para “mejorar” el sistema judicial. Pero no todos están convencidos. Para algunos, su respaldo incondicional a las políticas de la 4T y su pasado partidista generan dudas sobre su imparcialidad en un año electoral tan importante como 2025.
¿Cómo llegó a la presidencia?
La propuesta para que Ortiz asumiera la presidencia de la Primera Sala fue presentada por el ministro que dejará el cargo, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y aprobada por unanimidad. Sus colegas, Ana Margarita Ríos Farjat, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Juan Luis González Alcántara Carrancá, le dieron el visto bueno sin mayor debate.
Loretta agradeció la confianza en sus primeras declaraciones como presidenta, compartidas en X, y prometió un liderazgo comprometido con la justicia.
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