En un país donde el suicidio se ha convertido en la segunda causa de muerte entre jóvenes de 15 a 29 años, el 10 de octubre, Día Mundial de la Salud Mental, cobra especial significado. Esta fecha nos recuerda que, en los momentos en que sentimos que nuestra vida se escapa de nuestras manos, no estamos solos. Todos enfrentamos altibajos, y es esencial recordar que no hay que temer sentirnos perdidos.
Reconocer tus emociones y sentir puede ser difícil, incluso llegar a ser abrumador. Muchas veces nos encontramos lidiando con sentimientos de ansiedad, tristeza o frustración al sentirnos incomprendidos. Ignorar estos sentimientos puede parecer más fácil, pero a largo plazo puede tener consecuencias graves para nuestra salud mental.
La realidad es que el cuidado de la salud mental es esencial. Las emociones no son sólo experiencias pasajeras; son señales que nuestro cuerpo y mente nos envían. Al no atenderlas, podemos caer en patrones dañinos que impactan nuestra calidad de vida.
Millones de jóvenes mexicanos sufren un trastorno mental
En México, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1 de cada 5 jóvenes experimenta algún tipo de trastorno mental, siendo la ansiedad y la depresión las condiciones más comunes.
El 3,6% de los adolescentes de 10 a 14 años y el 4,6% de los de 15 a 19 años en México padecen un trastorno de ansiedad. Y 2.5 millones de jóvenes entre 12 y 24 años padecen depresión. Además, 9.9 de cada 100 mil jóvenes en esta edad han tenido ideas suicidas.
Asimismo, cada vez son más los jóvenes mexicanos consideran que la salud mental debería ser una prioridad en la salud pública, pero a menudo se encuentran atrapados en un sistema que no les proporciona las herramientas necesarias para enfrentar sus desafíos.
Es doloroso pensar que, en un mundo cada vez más conectado, muchos jóvenes se sienten aislados y sobrecargados por las expectativas que la sociedad les impone. Las redes sociales, aunque pueden ser una fuente de apoyo, también amplifican la presión y las comparaciones que a menudo llevan a sentimientos de insuficiencia.
La salud mental no es algo que debamos trabajar sólo cuando nos sintamos mal, sino que se trata de un trabajo de todos los días. Dedicar tiempo a cuidar de nuestra salud mental nos ayuda a construir resiliencia, fomentar relaciones saludables y disfrutar de una vida más plena.
¿Cómo cuidar tu salud mental?
Una de las cosas que puedes empezar a hacer es reflexionar sobre tus emociones y pensamientos. ¿Cómo te sientes realmente? ¿Qué pensamientos te están rondando? ¿Qué necesitas para mejorar tu estado emocional? Hacernos este tipo de preguntas de manera regular no sólo nos ayuda a entender mejor nuestra mente, sino que también nos permite reflexionar y conectarnos con lo que verdaderamente sentimos.
Mantén una vida activa, socializa con amigos y familiares, y dedica tiempo a tus hobbies o encuentra una actividad que te resulte gratificante hacer, puede ser hasta simplemente caminar, el punto es que te permita reencontrarte contigo mismo y despeje tu mente de tus actividades diarias. Estas son acciones que también contribuyen a nuestro bienestar.
También puedes establecer una rutina diaria y practicar técnicas de meditación o mindfulness que te ayuden a reducir la ansiedad y el estrés. Asimismo, no hay que subestimar la importancia de una alimentación equilibrada y un sueño adecuado para mantener una buena salud mental.
El diálogo también es importante
Es fundamental abrir el diálogo sobre nuestra salud mental y eliminar el estigma que rodea estos temas. Hablemos sobre lo que nos afecta, busquemos apoyo y construyamos una red de empatía y comprensión. Cada voz cuenta y puede marcar la diferencia en la vida de alguien. Si tú o alguien que conoces está luchando, recuerda que hay recursos disponibles, desde líneas de ayuda hasta profesionales que pueden ofrecer apoyo.
Recuerda, la depresión no tiene edad, los ataques de pánico no son para llamar la atención, la ansiedad no es una exageración, y acudir a terapia no te hace una persona débil. Al contrario, cuidar tu salud mental es un acto de infinita valentía, porque la salud mental es tan importante como la salud física. Por el derecho a expresar tu sentir sin juicio.
Este Día Mundial de la Salud Mental es un buen momento para recordar lo importante que es cuidarnos. Muchas veces vivimos con prisas y haciendo mil cosas, que se nos olvida checar cómo está nuestra mente, pero hoy es un buen día para empezar a hacerlo.
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